It's astounding to me every time I say that...to think that you, God, have a "Birthday."
Not a day to mark how old you are, as most of us do when it's our birthday.
Not a day to mark growth, progress in life, or changing seasons.
Not a day to mark past accomplishments and to plan for what's next.
But a day to mark the fact that God came to earth - that you humbled yourself, took on humanity and were born as a baby.
Today we celebrate that there was an actual day in history when you were born. Born in a stable, no less. Born with angelic fanfare, but only simple shepherds to welcome you as king. Born through pain and tears, followed by rejoicing.
Yes, it astounds me every time. And in this moment all that I want to say is - thank you for coming!
Thank you for coming, Jesus!
Thank you for coming.
Where would we be if you hadn't come?
How empty and hopeless life would be, if you hadn't come.
How lonely and sad we would be, if you hadn't come.
But you did come. And now we have every reason to rejoice! To celebrate! To not only praise you, but to enjoy you - here with us right now. You came so you could save us, so you could always be with us, and so one day we could be with you forever.
I'm grateful for these things every day, but especially today...your birthday. The King of kings and Lord of lords, the Good Shepherd, the Light of the world, the Great I AM, the creator of everything and every day - thank you for coming.
Merry Christmas!
Gracias Por Venir
¡Feliz Cumpleaños Jesús!
Me sorprende cada vez que digo eso ... pensar que tú, Dios, tienes un "Cumpleaños."
No es un día para marcar la edad que tienes, como la mayoría de nosotros lo hacemos cuando es nuestro cumpleaños.
No es un día para marcar el crecimiento, el progreso en la vida o las estaciones cambiantes.
No es un día para marcar logros pasados y para planificar lo que sigue.
Pero sí es un día para marcar el hecho de que Dios vino a la tierra, que te humillaste, asumiste la humanidad y naciste como un bebé.
Hoy celebramos que hubo un día real en la historia cuando naciste. Nacido en un establo, nada menos. Nacido con fanfarria angelical, pero sólo sencillos pastores para darte la bienvenida como rey. Nacido en medio del dolor y las lágrimas, seguidos de alegría.
Sí, me sorprende cada vez. Y en este momento todo lo que quiero decir es: ¡gracias por venir!
¡Gracias por venir, Jesús!
Gracias por venir.
¿Dónde estaríamos si no hubieras venido?
Qué vacía y desesperada sería la vida si no hubieras venido.
Qué solitarios y tristes seríamos si no hubieras venido.
Pero sí viniste. ¡Y ahora tenemos todas las razones para alegrarnos! ¡Celebrar! No sólo para alabarte, sino para disfrutarte, aquí con nosotros ahora mismo. Viniste para poder salvarnos, para poder estar siempre con nosotros, y para que algún día podamos estar contigo para siempre.
Estoy agradecida por estas cosas todos los días, pero especialmente hoy ... en tu cumpleaños. El Rey de reyes y Señor de señores, el Buen Pastor, la Luz del mundo, el Gran YO SOY, el creador de todo y todos los días, gracias por venir.
¡Feliz Navidad!
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